Tiro libre de Messi

a E.L. Thayer

Mala cosa para América ese día.
Alemania Götze adelantado había,
y por más que Argentina empatar buscaba,
el gol se les escondía y se les negaba.

Mas la esperanza no se había perdido.
A pesar de llegar el alargue al partido,
nadie en ningún lado tenía olvidado
que para Messi no estaba todo hablado.

La fe, que es virtud del humano corazón,
y ver a su combinado jugar con tesón,
mantenía la promesa de gloria altiva:
la ilusión de alzar la copa estaba viva.

Aunque va bien parado el equipo teutón,
casi anotó Higuaín en una ocasión
de un contragolpe por Lavezzi engendrado,
y eso a algunos los ha desalentado.

Y en una que herr Kröos la había perdido,
Messi a Hümmels se le ha desaparecido,
pero fue tan veloz que nadie de su conjunto
recogió lo que rodó sobre el penal punto.

Y en otra clarísima el Pipa se durmió:
Sin darse cuenta, con el balón se encontró,
mas por sorprendido, cuando quiso apresurar
disparó muy pronto y tan sólo pudo errar.

Para colmo, hasta un gol les han anulado
—un gol que los pies de Messi habían creado—.
La clavó al fondo de las redes Higuaín
y lo celebró… hasta que vio el banderín.

A los cuarenta Messi a Neuer superaba,
pero, sin gloria, un cruel defensa la sacaba.
El Alemán Kröos no andaba lento o malo:
al fin del primero a Romero salva un palo.

Al empezar el segundo, Messi la vio clara
mas por un error de la bota, le salió rara.
Así, los minutos se fueron como llegaron
hasta que germanos Klose por Götze cambiaron…

Comenzando la prórroga Palacio la tuvo,
trató un sombrero al que la grada detuvo;
mas al final Götze la recibió con el pecho
y con la zurda dejó al arquero deshecho.

Sólo quedan siete minutos a Argentina.
Siete para el gol de la celeste-albina,
y aunque atacan, las redes no pueden encontrar,
y parece que el árbitro quiere finalizar.

Con cientoveinte cumplidos, ¡a Messi golpean!
¡Falta! ¡Falta! ¡Los hinchas con reclamos vocean!
Un alemán por lo exhausto queda tendido:
perseguir a Messi lo ha deja malherido.

«Tiro libre». El máximo juez da la sentencia.
A treinta y cuatro yardas Messi da presencia…
Mientras el público se paraliza en vilo
Lionel Messi otea el arco, muy tranquilo.

Se ha parado a tres pasos, con convicción.
En su mirada hay fiereza y decisión.
La Gloria anhela obsequiar al Diez su tea.
Nadie respira cuando Messi al fin patea.

Sobre el mundo cae una luz generosa;
suele ser tan idílico, tan color de rosa.
Abundan risas en el mundo que Dios nos dio.
Mas no en América: Lionel Messi la falló.

Julio de 2014

Jorge Luis Pérez Armijos
guayaquileño; 1987 -