Te quedaste silenciosa i tranquila
quieta con frío, esperando;
yo no te vi en la vía
i ya me había marchado
caminé buscándote solo
caminé días o años
caminé, pero ante todo
caminé buscando tus brazos
caminé i caminé i caminé
pero tu ya te habías marchado
cuando te busqué
ya no me estabas esperando
i días te esperé
pero ya me habías olvidado.
Jorge Luis Pérez
guayaquileño; 1987