Te vi nacer; y fue tu primer llanto
maravillosa música a mi oído;
me sentí impotente y desvalido
de tu salud en el primer quebranto;
tu sonrisa primera, el sol; ¡y cuánto
por tu primer «pa-pa» fui estremecido!
El primer paso con tensión seguido...
De las gracias primeras el encanto...
Paso revista rápida en mi mente
a tu infancia, niñez y juventud
hoy que luces, mujer resplandeciente,
dieciocho años en gracia y plenitud,
mientras con todo amor dejo en tu frente
mi bendición, un beso y mi laúd.
maravillosa música a mi oído;
me sentí impotente y desvalido
de tu salud en el primer quebranto;
tu sonrisa primera, el sol; ¡y cuánto
por tu primer «pa-pa» fui estremecido!
El primer paso con tensión seguido...
De las gracias primeras el encanto...
Paso revista rápida en mi mente
a tu infancia, niñez y juventud
hoy que luces, mujer resplandeciente,
dieciocho años en gracia y plenitud,
mientras con todo amor dejo en tu frente
mi bendición, un beso y mi laúd.
29 de septiembre de 1980
Francisco Pérez Febres-Cordero
guayaquileño; 1934-2010
guayaquileño; 1934-2010