I
Pensé hacer un balance de mi vida
Al irme aproximando a los cincuenta.
Lo postergué; pero la idea me tienta
y no enfrentarla ya, fuera una huída.
Pues ha sido una vida bien vivida.
El dolor que miré como una afrenta
en mi Esencia vital, es quien me enfrenta
a la vida que es Vida: la sentida
en el nombre de cada Ser Humano
para saber que en este mundo hermoso
puedo extender sin resquemor la mano
y hallar un corazón que generoso
también la tienda. Que siempre hay un Hermano
en el tiempo feliz o el tormentoso.
II
Pero un balance de mi Vida debe
particularizar algunas cosas
que también ,,coseché siempre las rosas''
cuando supe sembrarlas. I en relieve
destacar, aunque sea en forma breve,
a mis Padres, influencias poderosas;
mis Hijos, experiencias luminosas;
mi Esposa, paz para que mi alma abreve;
tres o cuatro Figuras Paternales
dejándome sus dosis de enseñanza,
Hermanos buenos, Almas Fraternales
cuya Amistad es bienaventuranza,
Gracias a todos, gracias a raudales.
I en especial a Dios, Guía en mi Erranza.
Junio de 1984
Francisco Pérez Febres-Cordero
guayaquileño; 1934-2010