Estrofa antigua de vigencia eterna

Yo soy el susurro del viento que se hace gemido,
yo soy el gemido del ave que se hace canción;
yo soy la canción del arroyo que se hace bramido,
yo soy el bramido del trueno que se hace oración.

(De ,,Destino'', 1953)

Francisco Pérez Febres-Cordero
guayaquileño; 1934 - 2010