Crimen sin castigo

Al teniente coronel retirado
Francisco Febres-Cordero Santander

Fue al moderno Caín que vio la América
levantar el puñal contra el vecino
y fue testigo el murallón andino
de la invasión injusta; la colérica

Nación se alzó con ansiedad quimérica
de enfrentar el ataque repentina,
pero al valor auténtico y genuino
venció la gran desigualdad numérica.

Sobre el país caído y desangrado
se inclinó el criminal, tranquilamente,
y despojólo de lo más preciado...

Los años han pasado velozmente
¡y aún sin castigo el crimen ha quedado,
para escarnio y baldón del continente!

1964

Francisco Pérez Febres-Cordero
guayaquileño; 1934 - 2010