Antipoema

Cruzo la raya del formato y digo
que la rosa no es flor sino embustera.
Doy buenos días para dar tontera
y a veces por la culpa me maldigo.

Por ser irreverente desabrigo
mi testa que parece posadera.
y como el cielo se cayó en la acera,
en vez de un ángel pasará un mendigo.

Me río si me tilda de poeta
y si descubren mi afición discreta,
me someto al cinismo sin perdones.

Y por las ganas de joder, derribo
mi corazón y con los pies escribo
un poema de quesos y jamones.

Gonzalo Espinel Cedeño
guayaquileño; 1937-2019