Evocación

Retornando al Ayer de nuestra vida
hoy me siento sin ti como el viajero
que busca en vano un amoroso alero
en una gran ciudad desconocida.

Hoy nada te suplico ni te exijo;
es inútil soñar el alma nueva;
y sin embargo el corazón te lleva,
como un niño que lleva un crucifijo.

Por sendero distintos trajinamos
y el parque donde siempre nos juntamos
sólo existe a través de un espejismo.

Hoy, con la angustia del que nada espera,
en mi dolor, parece que tuviera
el corazón al filo de un abismo.

Vicente Amador Flor Cedeño
portovejense; 1902-1975