Herlinda Castro de Pérez Pazmiño
Vengo a llorar ante tu tumba. Vengo
a decirte que aún no me resigno...
(...¿Es que de ser cristiano no soy digno?...)
¡Transida aún de dolor el alma tengo!
Si a pesar en la muerte me detengo
desde un sentido material, me indigno:
la facultad de amar (divino signo)
sólo aporta dolor profundo y luengo.
Maternal tu cariño a todos diste
con unción y ternura indeclinable...
Matriarcal, la familia mantuviste
pendiente a tu consejo invalorable...
Y en aciago día te nos fuiste...
¡Oh ausencia todavía intolerable!
21 de noviembre de 1966
Francisco Pérez Febres-Cordero
guayaquileño; 1934 - 2010
guayaquileño; 1934 - 2010