¡Cretinos ignorantes,
con gran desatino,
dicen admirarte!
Y, con décimas
y coplas,
a menudo
de mal gusto,
¡afirman:
rendirte culto!
y cual búmeran;
lo de ellos,
para ti:
¡es un insulto!
Es un insulto
porque estos burricos,
como incultos asnos,
no habrá dentre ellos…
naíden que los de-sasne.
Durán, 21 de noviembre de 2012
Miguel Ortega Calderón
guayaquileño; 1943