El ceibo

Laberinto invertido en el paisaje
verdes rompecabezas multiformes,
polizonte de músculos enormes,
anquilosado en medio del boscaje.

Arabesco de signos centenarios,
cabelleras de crenchas despeinadas,
monograma con líneas enredadas,
torre con intricados campanarios.

Filántropo de normas discutidas,
desparrama sus fibras con largura
y conserva modestos remanentes.

Pilastra mayestáticas crecidas
para el soberbio templo de Natura
que quedó con las cúpulas ausentes.

Luis Espinoza Martínez